Nos acercamos al final de nuestro gran viaje single, pero antes de despedirnos, comenzamos el día con un desayuno en el hotel y un día libre para explorar a nuestro propio ritmo los encantos de Lima, una ciudad que siempre tiene algo nuevo por descubrir.
Podemos pasear por el Malecón de Miraflores, disfrutando de vistas espectaculares del océano, o adentrarnos en el barrio bohemio de Barranco, famoso por su arte urbano y sus acogedoras cafeterías. Para quienes deseen sumergirse en la historia, museos como el Museo de la Nación o el MALI son opciones imperdibles.
Los mercados locales, como el de Surquillo, son perfectos para disfrutar de frutas exóticas y platos tradicionales como la causa limeña o los anticuchos de corazón. Por la tarde, podemos relajarnos en los parques urbanos o buscar recuerdos en las tiendas de artesanías locales. La cena será libre y tendremos nuestra última noche en Lima para disfrutar a nuestro aire.